ENTREVISTA

Rodolfo Navarro es un artista valenciano, pintor y escultor, que va a exponer un cuadro de 1000 m2 en la Gran Muralla China de Pekín en agosto y septiembre de este año.

Como padre —con sus hijas en el colegio— hemos querido que nos hiciera partícipe de sus experiencias y conocimientos. Aparte de dos carreras superiores, habla inglés, francés y, nos confiesa que el chino lo domina a medias…

Cole S. Ana (C.S.A): Rodolfo, cuéntanos cómo surgió esta idea.

Rodolfo Navarro (R.N.): Fue en 1990 cuando acabando Bellas Artes en la Escuela Nacional de Bellas Artes de París, me plantee realizar un cuadro que pudiera llegar a ese público que nunca entra en un Museo o Galería de Arte Moderno; exponerlo en la calle para que una parte de la ciudad o un monumento fuera el marco de la obra. Comprenderás que para competir con el paisaje, el tamaño debía de ser suficientemente grande.

C.S.A.: ¿Cómo denominas tú ésta forma de exponer una Obra al exterior?

R.N.: El concepto lo titulé hace 18 años: “INTERACCIÓN PLÁSTICA”, es decir, cómo se relaciona el cuadro con su entorno y cómo interaccionan y cambian ambos (cuadro y paisaje) para el disfrute del público.

C.S.A.: ¿Has realizado otras obras similares con anterioridad?

R.N.: Sí, claro. En 1996 en las escaleras principales del Palacio de Fontainebleau en Francia, en 1997 en el Museo de Arte Moderno Schloss de Wolfsburg en Alemania, en el claustro de la Facultad de Teología de Valencia en 2002 y en un Centro Cultural de París en el 2003. La gran Muralla va a ser el proyecto más ambicioso de todos.

C.S.A.:He visto en tu Web que también expones esculturas monumentales ¿Dónde las has realizado?

R.N.:Están modeladas en una importante fundición del gobierno chino a las afueras de Pekín. He vivido allí durante semanas, trabajando con ellos, modelando y haciendo los moldes. En la exposición de la Gran Muralla habrán 12 esculturas de 2,5 m de altura.

C.S.A.: ¿Qué ha sido lo más difícil de este proyecto?

R.N.: Tal vez… El propio desarrollo del mismo. Esta historia empezó en 2004 y durante cuatro años ha evolucionado con lentitud. Los permisos, la instalación allí, los viajes, etc… Todo ha sido financiado con una pequeña economía domestica y el riesgo económico ha sido grande. Por supuesto el idioma fue una traba al principio, pero ya lo voy superando…

C.S.A.: A propósito del idioma… ¿El chino es tan difícil como parece?

R.N.: En absoluto. Es mucho más fácil de lo que te puedes imaginar. Como toda lengua (y más las no latinas) basta con conocer la lógica y estructura del idioma. Lo más difícil son los tonos. Cada palabra tiene hasta cuatro tonos diferentes y con cada tono significa una cosa distinta, por el contrario no se conjugan los verbos, no hay singular ni plural ni tampoco género. Las estructuras gramaticales son mucho más sencillas que las nuestras.


C.S.A.: ¿Qué les dirías a los jóvenes de hoy en día? ¿Cuál sería tu mensaje para ellos?

R.N.:Tal vez que lo más importante son las ideas. Una idea es, en sí misma, una mina inagotable de poder. El pensamiento, la fantasía… La creatividad son valores muy escasos en nuestra sociedad y por tanto se desconoce el potencial inmenso que ofrece no solo a las personas, sino también en el mercado laboral. Los conocimientos se transmiten y aplican pero con inventiva e imaginación son capaces de ir más allá, crear nuevas direcciones y avanzar en el mundo.

C.S.A.: ¿Cuándo será la exposición?

R.N.: Se empezará a montar en el mes de octubre y se inaugurará el 24 de ese mes, así que no podremos volver hasta mediados de Noviembre.

C.S.A.:¿Os vais toda la familia a China… Durante varios meses?

R.N.: Sí, salimos en julio. Pensamos que va a ser una experiencia única para las niñas y también para nosotros. Allí tengo una casa montada, oficina, coche y amigos; tenemos muchas ganas de estar todos en Pekín.

C.S.A.: Rodolfo, gracias por compartir tus experiencias con todos nosotros. Estaremos pendientes de vuestras noticias.